Queridos morsapedistas, el día de hoy se comunica no con ustedes al que todos conocen como La morsa de Tueris y que aparece de vez en cuando para decir un par de pavadas y entretenerlos. Nada de eso, esta ocasión simplemente soy Alexander Garduño, incluso algunos ya me habrán conocido como otro vengador más entre tantos que hay.
La única razón por la que escribo esto es expresarles que ya nada es igual, en lo más mínimo. Al principio me divertía escribir todas esas aventuras de algunos personajes, añadir divertidas imágenes y buscar las bromas más originales para hacer de este sitio un creador de sonrisas. Pero no estoy seguro acerca de si algo habrá cambiado, algo que me hace buscar nuevas cosas. Una de mis teorías es que me condené a un conocimiento que no asimilé y destruyó todo lo que alguna vez fue La morsa de Tueris.
No estoy seguro acerca de si seguiré aquí o me retire para siempre, la verdad es que ambas opciones están al mismo porcentaje; pero es posible que se hayan percatado del nuevo estilo de mis ediciones, uno de los más precarios artículos fue el del visionario "&&&&&&&" en el que señalo muchas de mis opiniones, o como me gusta decir, "Es como mi propia Revolución 9, o mi propia Suite de Madre de Corazón Atómico". También mensajes como "Hoy es el día en que comienza el resto de tu vida", las nuevas frases trascendentales o eventos tan ridículos como la Semana Rosa.
Pase lo que pase, les informo que si en algún momento de su vida sienten necesitar la ayuda de un colega culpable de todo esto que ahora es Morsapedia, saben donde encontrarme.
Les deseo una buena y no demasiado larga vida. Disfruten de cualquiera que sea este día, es más tarde de lo que creen.